Viajes que hice y no hice. Fez.

Posted on

Sukram baby


Pasé tres tardes, qué bien pudieron ser tres siglos, atrincherado en la azotea de un apartado Riad de Fez. Atrapado como un djinn sediento de libertad, maquinando trampas para aquellos que osaran a concederles un deseo.

Pasé amaneceres, atardeceres y noches a las que llegué tras atravesar campos verdes de alfalfa y me quedé allí, bajo unas chispas de agua que no llegaron a mojar nada. Sin convertirme en el gran genio de la lámpara, siendo una cabeza desproporcionada e independiente, sin importarme demasiado cuál sería el siguiente paso a dar.

No puedo afirmar que llegué a darlo, que permanecí para siempre en esa torre fortaleza de la que me había apoderado. Tampoco puedo asegurar que descendiera y, sin arrepentimiento, echase a correr por cualquiera de los 9000 callejones de esta Medina y me perdiera.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s